Antipublicidad

Los publicistas nos hemos metido a un ritmo bestial con tal de hacer consumir a la gente.  La hemos definido la meta más alta de nuestra profesión como si nada fuera más importante. No nos hemos propuesto estimular al auditorio a pensar, reflexionar o bienconvivir. No. Solamente nos hemos propuesto hacerlo comprar ¡a toda costa!…